Bauhaus ¡presente!

(el futuro no llegó)

La pregunta sobre cómo queremos vivir, que motivó la propuesta de la Bauhaus, tiene 100 años después, en un mundo signado por la desigualdad, una enorme vigencia para quienes somos educadores.
Bauhaus ¡presente! invita a reivindicar un proyecto pedagógico que creyó en el poder transformador de la educación; propone traer al presente y a la realidad Argentina y Latinoamericana, aquella utopía de un mundo para todos, por el que trabajaron estudiantes y docentes de la lejana y revolucionaria escuela.
Desplazándose a zonas ajenas a la versión sesgada y destilada de la Bauhaus con la que fuimos educados los diseñadores a lo largo de un siglo, pretendemos con este programa -que concluye con una exposición en octubre 2019 y una jornada docente en noviembre, pero tiene su eje en los trabajos de los estudiantes- un recorrido por sus lugares más contradictorios e inconformistas, para que como un fuego, encienda el deseo de ser mejores.

¿Qué ideales de la Bauhaus retoma Bauhaus ¡presente!?

La igualdad de género. La Bauhaus sostuvo entre sus principios originarios, la igualdad de género. Algo que, como tantos otros valores de la escuela, fue un legado que tomó de la revolución soviética. Así, más allá de sus muchas contradicciones, propició que las chicas pudieran estudiar. En los últimos años, las investigaciones para el rescate de las obras de las mujeres de la Bauhaus -sin duda opacadas- es una de las líneas de investigación más concurrida, en el marco de la lucha feminista por la igualdad de derechos.

La utopía de una sociedad igualitaria. El más profundo y olvidado ideal de la Bauhaus, fue creer en la capacidad del diseño para inventar un mundo menos desigual. Trascendiendo el diseño de objetos accesibles, se propuso construir una nueva sociedad. Una utopía que hoy, ante la profundización de las desigualdades, como docentes sentimos la responsabilidad de retomar.

La educación por el arte. La historia oficial de la Bauhaus la ha nominado racional-funcionalista, y esta definición implica un recorte más que injusto y limitativo. El relato dominante desdeña que la Bauhaus fue antes, un lugar de libertad e irracionalismo, de comunidad de las artes como espacio transformador de la sensibilidad humana. Lo que la podría definir con mayor justicia fue sí, su eclecticismo. Su espíritu libertario y apertura. Reivindicar el “doble origen” dadá-constructivista de la Bauhaus, tiene sin duda implicancias ontológicas. El devenir de la historia nos habilita hoy a la reapertura de viejas preguntas acerca del para qué del diseño, el sentido de pensarlo transdisciplinarmente, y su compleja e ineludible relación con el arte, entre muchas otras. Intentamos a través del proyecto Bauhaus ¡presente!, transitarlas.

Diversos temas de investigación -desde las mujeres de la Bauhaus a la confluencia de vanguardias, pasando por la nueva tipografía- fueron abordados por los estudiantes de los distintos niveles, a través de los siguientes procedimientos, que orientaron el diseño de los trabajos prácticos: fotografía / retrato y fotografía urbana; fototipomontaje; experimentación tipográfica; infografía; publicaciones alternativas; intervenciones espaciales.