PUNTO AZUL

Reciclaje con inclusión social

Punto azul
Tachos de Residuos de Punto azul

Los cartoneros, recuperadores urbanos, o recicladores de base, son los trabajadores que con sus propias manos recuperan residuos sólidos urbanos (RSU) de las calles o de los basurales.
La actividad se desarrolla en el espacio público urbano, bajo las formas de trabajo independiente o cooperativo, aunque existen muchos casos de explotación y trabajo infantil. Se estima que en Argentina hay alrededor de 200.000 cartoneros. El trabajo de las y los cartoneros forma parte de la Economía Popular, la economía de quienes se inventaron su propio trabajo en la exclusión. En la Economía Popular el trabajo sin derechos es la regla y el avance de la organización ha logrado conquistas históricas, -limitadas geográficamente a CABA en el caso de los cartoneros, en el marco de un proceso abierto en distintos puntos del país.
Con la coordinación de la Federación Argentina de Cartoneros y Recicladores y el Movimiento de Trabajadores Excluidos de La Plata, estudiantes del Liceo y otras dependencias de la UNLP, este proyecto que se inició en 2016 y del que el Taller C forma parte, intenta visibilizar y
alojar a actores sociales que no participan de una ciudadanía plena en cuanto al reconocimiento y ejercicio de sus derechos: trabajadores y trabajadoras excluidos.
Desde el trabajo con las y los estudiantes, apostamos al efecto multiplicador y de empoderamiento desde la perspectiva de los Derechos Humanos: el derecho al trabajo, el derecho a la vida, a la salud, a la educación, a una niñez feliz, entre otros. Comprender los derechos como conquistas sociales supone entender el rol fundamental de las organizaciones populares en la construcción de un futuro con justicia social. Hacemos nuestra la idea de que “sin poder popular no hay justicia social”, asumiendo el rol transformador que está llamada a desempeñar la institución escolar frente a la reproducción de un sistema de vida injusto, basado en la lógica del beneficio y en una “cultura del descarte” que ha llegado al punto de poner en peligro la vida en el planeta, mientras castiga a millones de seres humanos a vivir como “residuos sociales”. La escuela ya no es meramente la institución que reproduce el saber socialmente legitimado, sino un ámbito privilegiado para la construcción de una ciudadanía comprometida con la lucha por los Derechos Humanos; entendiendo que los derechos son un campo de disputas políticas, en el cual hay retrocesos o avances en función de las posiciones que alcancen los sujetos sociales en desventaja.
En el Taller C, en 2016 mediante concurso, los estudiantes diseñaron la marca gráfica que identifica a Punto azul, como así también, distintos sistemas de comunicación visual: intervenciones en el espacio arquitectónico de las instituciones escolares, para visibilizar el proyecto, publicidades, flyers, señalización, etc. Hasta el día de hoy, el equipo de comunicación visual del Taller C trabaja con alumnos de diseño industrial para facilitar las comunicaciones que realizan las promotoras ambientales de La Plata y Ensenada.